Pretender que no vivo inmersa en mis fantasías, metida de cabeza en mis diálogos interiores que rara vez no plasmo en un papel por la necesidad de sacarlos de mí de alguna manera, aunque no sea la mejor ni la más productiva, es la más fácil y la que tiene menores consecuencias.
Ojalá fuese capaz de abrir la boca y soltar todo lo que pasa por mi mente...hacer explotar mis sentimientos fuera, y no dentro de mí, causando destrozos a veces irreversibles.
Abro la boca y sólo se susurrar, nadie logra escucharme, ni tan siquiera me oyen.
awww
ResponderEliminarADORO TU BLOG
esta super hermoso
y fijo te sigo
y con respecto a lo que escribiste: creo que muchos de los escritores son así, porque podemos desahogarnos con el papel pero se nos hace imposible poder pronunciarlo... pero creo que tarde o temprano nos vemos obligados a hacerlo
cuidate
mil besos
El boli es el mejor compañero y el papel el más entendedor de lo que pensamos.
ResponderEliminarY todos tus seguidores, escucharemos tus ideas, objeciones y cada entrada! Buena entrada, un besito :D
Y si, me ha pasado. Pero escribir es lo que muchas veces el corazón nos pide. Mucha suerte.
ResponderEliminarDuele decir que por acá pasa lo mismo, duelen las palabras no dichas algunas van envenenando de a poco aquí adentro...
ResponderEliminarEl refranero español es muy sabio y suele tener un refrán para cada ocasión y en este caso hay uno que viene al pelo: "mas vale una vez rojo , que mil amarillo"
ResponderEliminarYo soy de la opinión que prefiero sonrrojarme por decir lo que pienso antes que tragarme palabras que me duelan.
bonito blog y gracias por la visita.
nos leemos
salu2